MÉXICO EN EL EXTRANJERO / DESDE CABINA
28/02/2025
México en el extranjero / #DesdeCabina
Si algo ha cambiado en el mundo a partir de finales del Siglo XX es la interdependencia que se ha generado entre las naciones, aunque en la actualidad muchos estén volviendo los ojos a lo local a través de un nacionalismo que ya no podrá abstraerse únicamente a lo interno.
Finalmente, los «vasos comunicantes» que existen entre los diversos regímenes que dominan el mundo, si bien se reacomodan en estos tiempos, perdurarán por lo menos por lo que resta del siglo actual (XXI) en el que un nuevo «orden mundial» se está gestando.
En ese contexto, México atraviesa por una de sus épocas más oscuras y difíciles frente a una cada vez mayor depauperización de la vida social y económica y una crisis de Estado que no permite brindar siquiera las condiciones para lograr una vida digna en los ámbitos educativos, de salud, vivienda y alimentación siquiera.
Ya no digamos de seguridad que nos ha costado más de 212 mil muertos en los últimos 6 años. Y para colmo, tras la pandemia de 2020 se incrementaron en el país los índices de adicción a drogas blandas y duras, lo que ha agudizado la crisis social que hoy enfrentamos.
Frente a ello, la oposición al oficialismo en México ha comenzado a «alzar la voz» a nivel regional y mundial con la exposición de la serie de problemáticas que desde el poder pretenden acallar quienes hoy gobiernan, bajo la narrativa de un «humanismo» cuya falsedad se palpa todos los días en la vida cotidiana de los mexicanos.
Ante las amenazas del nuevo gobierno Trumpista – no al pueblo, sino al régimen que hoy gobierna al país, pero que al final de cuentas se traduce en perjuicios para toda la población – recientemente el dirigente nacional del PRI, que poco a poco a ido asumiendo su papel como el principal y más efectivo partido de oposición al oficialismo actual, Alejandro «Alito» Moreno realizó una gira de trabajo al Capitolio en Washington, la sede del poder Legislativo de Estados Unidos, para sostener reuniones con importantes representantes del gobierno republicano de aquel país, con la finalidad de discutir la posibilidad de retomar las tradicionales reuniones Interparlamentarias canceladas por el actual régimen y exponer la grave problemática actual que enfrenta México, con un régimen totalitario que no acepta la crítica y muchos menos el que alguien difiera de sus «ideas de cambio» que a «rajatabla» han impuesto en los últimos 6 años.
Obviamente, al gobierno le preocupó que un «agente» político de gran experiencia se reuniera con los altos representantes del legislativo estadounidense y, una vez más, arremetieron contra el dirigente nacional del PRI «reviviendo» la demanda de juicio político en el Congreso, lo que por cierto – después de tantos años – hoy no tiene fundamentos jurídicos para llevarse a cabo.
Es decir, como decimos en México, cada que le conviene al oficialismo «espantan con el petate del muerto», aunque éste ya esté «enterrado» desde hace tiempo.
En Palacio Nacional se encendieron los «focos rojos» al saber de la presencia de «Alito» Moreno en Washington y que se reuniría con «figuras» importantes del Senado estadounidense.
El también dirigente de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL) llevó bajo el brazo mucha información y documentación sobre la dura realidad del país, lo que obviamente no solo molestó, sino que preocupó al oficialismo acostumbrado a no reconocer y mentir sobre la situación actual de México.
La «puntilla» del asunto fue la reunión, el lunes pasado, del propio Alejandro Moreno con el Cuerpo Diplomático acreditado en México.
En voz del propio líder priista, se puso de manifiesto que «el mundo avanza con alianzas fuertes y una visión clara de futuro, y México no puede quedarse atrás.
Para que nuestro país tenga el lugar que merece en el escenario global, necesitamos una diplomacia activa y efectiva, que no solo represente a nuestra nación, sino que también genere inversión, empleo y desarrollo para nuestra gente.
En el PRI se apuesta por fortalecer nuestras relaciones internacionales, construir puentes de entendimiento y abrir nuevas oportunidades».
Ahí estuvieron, escuchando atentos y «tomando nota», los embajadores de Alemania, Argentina, Finlandia, Indonesia, China, Suecia y Tailandia entre otros, así como los encargados de Negocios y el Oficial de Asuntos Políticos de la embajada de Estados Unidos en México, Sergio Moreno.
