ARRANCAN LAS CAMPAÑAS / LA OPINIÓN DE ADRIÁN VALENCIA
08/03/2024
Arrancan las campañas / #Luminiscencia
Han iniciado oficialmente las campañas por la Presidencia de la República. En Fresnillo, Zacatecas, uno de los poblados más violentos del país, Xóchitl Gálvez centró su discurso en precisamente en ese cáncer que predomina en muchas regiones de México.
Hoy suman, dijo tajantemente, 180 mil ejecutados a unos meses de que concluya el sexenio.
El escenario no pudo haber sido mejor: un municipio acostumbrado a las balaceras, los levantones, el cobro de piso y el control territorial del narco.
Claudia Sheinbaum, la candidata de Morena, eligió como escenario el Zócalo capitalino, tantas veces llenado por López Obrador, para defender los logros de la llamada Cuarta Transformación.
Claudia Sheinbaum, la candidata de Morena, eligió como escenario el Zócalo capitalino
Programas sociales, incremento al salario mínimo, combate a la corrupción y al neoliberalismo, humanismo mexicano. El discurso neoprogresista que ha distinguido esta etapa de la historia nacional.
De fondo, la imagen de la Catedral Metropolitana y cientos de banderas de Morena ondeando entre los asistentes.
Álvarez Maynez, el candidato de Movimiento Ciudadano, arrancó en Lagos de Moreno, acusando a sus adversarias de actos anticipados de campaña.
Jalisco, uno de los bastiones de ese partido, fue testigo de un discreto evento cuyo protagonista es un personaje que, si bien no arrancó con el pie derecho el tramo rumbo a la elección del 2024, ha demostrado que tiene cualidades para debatir, conectar y proponer.
Morena y su candidata arrancan con una amplia ventaja. Las encuestas la ubican, cuando menos, con veinte puntos de diferencia sobre Xóchitl Gálvez.
Pero en una campaña nada está escrito, sobre todo si entendemos el «momentum», cuando algo se puede o no, convertir en un fenómeno mediático y político.
La hidalguense, por ejemplo, irrumpió en la contienda presidencial con fuerza. Lleno un vacío que la oposición no había podido o no había querido llenar.
Pero eso no ha sido suficiente, su «momentum» se quedó en stand by y aunque hoy luce más estructurada, no ha encontrado el factor que logre encender el ánimo del electorado.
Claudia, por su parte, ha sido sumamente disciplinada, aunque también ha tenido momentos complicados últimamente: el Estadio Azul, el abrazo-no abrazo con la candidata al gobierno de la Ciudad de México (Clara Brugada) y el trastabilleo sobre la corrupción.
Eso, sin embargo, no le resta méritos. En sus diferentes apariciones en los medios de comunicación ha sido consistente, clara y prudente. Se le ve tranquila y cordial. Entiende el valor de la relación con los principales comunicadores.
En la parte de propuestas, Claudia Sheinbaum ha plasmado cien puntos como parte de su agenda de gobierno y de lo que considera será «el segundo piso de la transformación».
Lo anterior luce mucho más robusto frente a lo que han presentado el resto de los candidatos.
Pero esto apenas inicia. Vendrán también, en los meses subsecuentes, lo que en campaña se conoce como «contrapropaganda» o «campañas negras», esos mensajes que buscan enaltecer los aspectos negativos de un personaje para impulsar la transferencia de votos.
Recordemos que, como dice el estratega Antonio Sola, al electorado se le llega más fácil por la parte emocional que por la racional, y en ese terreno los mensajes bien diseñados y las campañas de aire y en redes sociales, serán fundamentales para acompañar los actos de tierra, en donde las y el candidato harán uso de sus estructuras territoriales y del apoyo de los cuadros de partido.
La batalla por la Presidencia inició, que gane el mejor.
