La Opinión del Abogado Nakachi / Solidaridad a la Mexicana
13/11/2023
Solidaridad a la mexicana
Cada día nos acercamos al compromiso electoral de 2024. Cuando escribo estas líneas contabilizo en el calendario que nos faltan 205 días para el dos de junio próximo.
El tiempo del presidente en Palacio agoniza e insisto, ahora él mismo se enfrenta a su principal adversario; el cual es sutil, invisible e inexpugnable: la terca realidad.
Por más que intento ser generoso con el farsante, no hallo un solo argumento por dónde pueda salir bien librado. Se encuentra a la deriva y cada día más solitario.
Si acaso, solo con la mano bolivariana que lo mueve desde su alcoba.
Pero que también sospecho que sin poder y cuando se tenga que ir también ésta lo abandonará. Nada extraño, así suele ser en las familias disfuncionales.
Extraviado en su sed desbordada de poder, en la desazón ni siquiera se dio cuenta que la realidad fue generosa con su miserable gestión.
Con la estructura y poder del Estado, hoy sabemos que sí supo de la dimensión del huracán Otis en las costas de Guerrero, pero de nueva cuenta, el indolente respondió con la frialdad propia de los tiranos consumados.
Sólo que para desgracia de López Obrador, él es un tirano en ciernes que no tengo duda terminará como un aspirante a dictador frustrado.
Con el paso de Otis, tuvo en sus manos la posibilidad de hacer un llamado a la unidad, la solidaridad, visitar Acapulco y atender personalmente la tragedia para callar tantas bocas y mostrarnos su rostro de estadista, más prefirió la de un populista bananero.
Optó por aparecer en su faceta de prestidigitador y responder con más demagogia y odio, de ese tamaño la mezquindad del embustero.
¿A quién beneficia esta narrativa de odio, simulación y confrontación?
La narrativa del presidente basado en la teoría del conflicto marxiana, apuesta a generar conflicto social como mecanismo de cambio.
Por eso la obsesión presidencial desde el día uno en tomar control de los medios de comunicación y la confrontación con el periodismo libre e independiente que no se plaga a su falsa realidad.
Controlados y maiceados los medios, viene la parte de la propaganda hasta tatuarle en el alma a los mexicanos la perorata de la “transformación” e insistir en la fobia contra el capitalismo.
Así, odio, lucha contra el pasado y propaganda son la pinza e instrumento para pincelar desde la mañanera la realidad alterna presidencial.
Tanta hiel derramada desde Palacio funcionó al presidente los primeros años.
Rumbo al sexto año, es insuficiente para paliar el presente que es más descarnado.
El impacto mediático de las redes sociales de siglo XXI cae como dardo envenenado para callar o contradecir al charlatán de Macuspana.
Todos los días exhiben el drama que vivimos los mexicanos con este gobierno negligente y criminal.
Desparramar tanto veneno como alacrán es un búmeran, tarde que temprano se revierte sobre quien lo escupe El presidente de México cometió un error garrafal al querer estatizar la solidaridad ante la tragedia que viven miles de acapulqueños que lo perdieron todo.
Si el manual populista dicta que “nada de asociaciones civiles” para ayudar a Acapulco, porque le quitan protagonismo al ogro filantrópico del Trópico, como bien define el maestro Pablo Majluf, al embustero.
Es de destacar la respuesta de la sociedad civil organizada y en muchos casos, las aportaciones de civiles que se han organizado desde sus trincheras en diversas latitudes del país para llevar víveres a Acapulco.
La lista es conmovedora: desde brigadas para llevar lo más básico hasta grupos organizados para acercar en la odisea hacia el otro puerto turístico guerrerense, toneladas de tacos de canasta, al pastor, agua, helado, nieves, colchones, laminas, sabanas, etcétera.
Lo escribo, e imagino el berrinche de la pareja presidencial porque saben que la solidaridad tiene como efecto la resistencia democrática.
Basta recordar el sismo de 1985 y la respuesta tardía del gobierno de De la Madrid. En la catástrofe, la solidaridad fue más allá, hermanó al pueblo de México.
Cuando despertó del encanto de la “dictadura perfecta”, esto fue la antesala de la derrota del PRI en 1988.
El Estado respondió con el fraude orquestado por el Lic. Manuel Bartlett, pero la semilla ya estaba sembrada, México ya no fue el mismo. Como tampoco será el mismo después de Otis.
A lo anterior súmele el escándalo del decomiso de la tonelada de metanfetaminas en Hong Kong con sacos de Segalmex, el espionaje a propios y extraños de parte de la Fiscalía de CDMX, la renuncia del ministro Zaldívar para plegarse a los pies de la “científica”, y la joya de la corona: el cero presupuesto asignado para 2024 desde el Legislativo a la reconstrucción de Acapulco y el decreto por el cual se anunció que la tragedia ya pasó.
Si el presidente insiste en maquillar la realidad, los mexicanos respondemos con más solidaridad.
Por eso no tengo duda que en 2024 esta pesadilla populista terminará porque en el proceso de la devastación y reconstrucción de Acapulco, los mexicanos ya nos dimos cuenta que la verdadera tragedia que se padece en el país es la llegada en 2018 de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de la República.
Huroneo
Hoy se anunciarán los candidatos de MoReNa para las nueve gubernaturas en disputa el próximo año y por supuesto, seguirá la guerra interna de la cual Martí Batres nos compartió hace días en un audio que la cosa va en serio.
Solo por citar tres ejemplos de que en la secta las cosas no pintan nada bien, son las entidades de CDMX, Puebla y Veracruz, donde hoy los changos enloquecerán y se harán trizas. Por favor, no los interrumpan.