MÉXICO YA DESPERTÓ / LA OPINIÓN DEL ABOGADO NAKACHI
21/02/2024
México ya despertó / #Dimittis
A ciento tres días de la elección más importante en la historia reciente de nuestro país, la esperanza cambió de manos. La ciudadanía arrebató al presidente de México la narrativa y Xóchitl Gálvez hizo lo propio con la agenda pública.
Sin discurso y sin guion, el embustero está reducido a la nulidad.
La imagen del Palacio Nacional cercado es la evidencia del charlatán atrapado en su trinchera palaciega, su reality matutino y la terca realidad.
En el ocaso de este gobierno tragicómico, su titular está desencajado, furioso, iracundo. La maquinaria de propaganda que a diario aceita el vocero Ramírez Cuevas es incapaz de darle vuelta a la etiqueta del #NarcoPresidenteAMLO .
El repudio social apenas comenzó y el presidente “historiador”, amante de la historia broncínea del libro de texto gratuito, lo sabe. Vaya que el demagogo digno del siglo pasado sabe que muy pronto será el “INNOMBRABLE” en su versión remasterizada de siglo XXI.
Lo histórico de este gobierno es la escena del domingo pasado en el Zócalo capitalino a reventar con la arenga: “¡Narcopresidente!”
¿Recuerda esa proclama en sexenios pasados?
El impacto de la marcha ciudadana del pasado domingo se traduce en que México por fin despertó y sabe que el dos de junio se juega su futuro. El oficialismo ya leyó que la jornada electoral será histórica en su número de participación ciudadana, están desesperados y espantados. Vaya que tienen muchos motivos para estarlo.
La concentración masiva fue una forma de decirle al engañabobos que México quiere libertad, democracia y exige que el poder saque las manos de la elección. Los ciudadanos estamos hartos de tanta patraña en la época de la “transformación”.
Hay que insistir dónde estamos parados. En la escena tenemos dos proyectos. El oficial, basado en el modelo autoritario estatista de partido hegemónico, pero sin su estructura y sí la de una secta evangélica; es decir, todo es la voz de su líder. Su grey está para callar y obedecer con los ojos cerrados.
Para consolidarlo necesitan pobreza y polarización. Lo novedoso del proyecto del priista de cepa tabasqueño es que al ser él todo en el gobierno, el corolario es la dictadura. Como engañó Francisco Franco a los españoles, Castro en Cuba, Chávez en Venezuela u Ortega en Nicaragua.
El otro es el liberal democrático que tanto ha sido atacado por la demagogia de la secta y que hizo pausa en 2018 para dar paso al desastre actual. Es ese México que veníamos construyendo en las últimas décadas. El que generó instituciones, programas de gobierno, democracia, transparencia, rendición de cuentas y venía disminuyendo la pobreza. No era perfecto más sí perfectible.
Como dice el clásico, nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido. Pocos lo defendieron y hasta artistas e intelectuales celebraron la llegada del socio mexicano del Foro de Sao Paulo.
Hay que tenerlo presente para comprender claramente lo que se viene de aquí a la elección de junio de 2024. Después de la marcha ciudadana histórica en defensa de la democracia del pasado 18 de febrero, en Palacio están prendidas las alarmas.
Esto apenas comienza. Conforme pasen los días, le saldrá más cola al embustero. Este repudio social ya no se detendrá.
El próximo primero de octubre, cuando Xóchitl Gálvez tome protesta como presidenta de México, recogerá cenizas y tendrá el desafío de unirnos en un país infectado de odio. Como lo debe hacer cualquier jefe de Estado.
El siglo pasado lo advirtió Orwell: “No se establece una dictadura para salvaguardar una revolución; se hace la revolución para establecer una dictadura”.
Haga el ejercicio de cambiarle a la frase de Orwell la palabra “revolución” y cámbiela por “transformación”. ¿Espeluznante, verdad?
En diez días comenzará en forma la campaña electoral. Xóchitl no dejará de crecer, mientras la candidata del presidente cada día la realidad la pondrá en su justa y pequeña dimensión. En cada uno de los tres debates ya cantados, la hidalguense apabullará a la “científica”.
Los escándalos del presidente y su clan no pararán. Es lógico reza el aforismo que quien siembra vientos recoge tempestades. Su lengua viperina al mentiroso compulsivo lo sentenció a vivir reculado en su ratonera donde ha hecho más honda su adicción a tejer cuentos.
No hay que interrumpirlo, mientras el chapucero de Palacio se deleita y alimenta de la fantasía, los ciudadanos con la llama de la esperanza en nuestras manos, tenemos que materializar la marea rosa el dos de junio en votos en las urnas.
18 de febrero, el país despertó, comenzó el fin de esta pesadilla.
Huroneo
La jornada cívica del 18 de febrero fue el preámbulo de la jornada histórica de participación ciudadana que veremos el dos de junio.
La arrogancia del embustero y su criatura política los hacen descalificar con calumnias a los ciudadanos que nos movilizamos en 115 ciudades.
El dúo pantano entre más infamias nos espetan, más se hunden. El demagogo cada día irá mutando en el nuevo innombrable. Por respeto a la verdad, no los interrumpan.
