LA NUEVA DICTADURA CASTROCHAVISTA / DIMITTIS
19/09/2024
La nueva dictadura castrochavista / #Dimittis
Como desde hace muchos meses sostuve en esta columna, la elección del pasado dos de junio fue nuestra prueba de fuego: democracia o tiranía. Como vimos, perdió la democracia. Ya nos hallamos con un régimen enquistado que no se irá.
El régimen que aseguró que juntos harían historia, ya no le quedan más máscaras para ocultar su filia hacia la ideología del socialismo de siglo XXI.
Tiranía que se funda en la pobreza (para el pueblo), la militarización para preservar el poder y el necesario vínculo cercano con el crimen organizado ligado a la mafia bolivariana con su cerebro orquestador en Cuba.
El Foro de Sao Paulo que surgió en 1990, nació como una respuesta de la revolución cubana después de que cayó el muro de Berlín y se desmoronó la URSS.
Cuba se quedó sin su protector político y financiador económico. 34 años después, esta agrupación latinoamericana ha sido exitosa, pues han volcado a la mafia latinoamericana ya varios países: Venezuela, Colombia, Nicaragua, Bolivia, Ecuador… y desde 2018, nuestro país.
A diferencia de la internacional rusa que buscó aglutinar en el comunismo a un mundo cosmopolita, tuvo como obstáculo la lengua, pues topó en cómo llevar el idioma ruso a sus afiliados. Fue una labor titánica que no cuajó.
En cambio, los tiranos latinoamericanos tienen la ventaja de compartir la misma lengua castellana y ni qué decir de la desigualdad que distingue a la región más atrasada del planeta.
Un verdadero caldo de cultivo para cualquier demagogo taimado con ansía de ostentar el poder.
Así, pobreza y deseo de poder, con la narrativa del despojo, cocinan un encono social que atendido con becas y dádivas generan un vínculo fortísimo.
Es lo que hoy tenemos en nuestro país: buena parte del país, aplaudiéndole a un enfermo mental por destruir nuestra nación en nombre del bienestar del pueblo. Odio puro. Fascismo puro.
Por medio del extinto PRD y sus líderes afines, el castrochavismo se filtró desde hace buen tiempo a nuestro país, sólo que con el embustero, México se volvió la cereza del pastel para la sobrevivencia de la madre de las tiranías, la dictadura cubana.
En La Habana el gozo no para desde junio pasado.
A cambio de espionaje y operación política que garantice su estancia en el poder, con el embustero moviendo los hilos desde La Chingada, la dictadura castrista tiene el financiamiento asegurado.
En el país orwelliano que a diario construye el mentiroso compulsivo, con el engaño de quien se siente todopoderoso, dividió al país y normalizó el encono social.
De sus acuerdos chuecos como su caminar, ni cómo camuflarlos. Cuando se sabe que MoReNa es una secta con tintes fascistas, no extraña que secuestren senadores, abran expedientes y persigan penalmente a opositores.
Que nos quede claro, el diosito del trópico no se va a ir el 1 de octubre. En su ausencia en Palacio, estará más presente que nunca a solicitud de la nueva comandante de las fuerzas armadas.
Ese fue el proyecto por el que operó toda su vida. Ya probó del elixir del poder y hay que entender el matiz religioso en el que emprendió su “cruzada”.
Ya opera para cerrar la pinza, heredando en una sucesión discipular en 2030 la “misión” a su vástago más taimado.
Esto fue la trampa en la que cayeron en julio de 2018 millones de inocentes que aseguraron que era un buen hombre, luchador social, trabajador, humanista y quién sabe cuántos calificativos producto de su fe hacia un demagogo sin escrúpulos.
Vale la pena recordar a Orwell: “El poder no es un medio, sino un fin en sí mismo. No se establece una dictadura para salvaguardar una revolución. Se hace la revolución para establecer una dictadura.
El objeto de la persecución no es más que la persecución misma. La tortura solo tiene como finalidad la misma tortura. Y el objeto del poder no es más que el poder.”
Según el dictado del Foro de Sao Paulo, necesitan tomar control del Poder Judicial para asegurarse jamás perder el poder por la vía legal. Es lo que estamos viendo en estos días.
El demagogo tiene prisa en salirse con la suya.
Su “reforma” no busca mejorar sistema judicial o la impartición de justicia, lo mueve el rencor y el poder, que es el elemento que lo mantiene vivo y alerta todos los días.
En su sexenio, quien padece de la enfermedad de Hubris no negó su simpatía por Cuba, Nicaragua, Venezuela, Bolivia (hasta rescató con recursos públicos y asiló al narcopolítico Evo Morales).
Cuando la pobreza económica, la hambruna, el despojo y la bota militar en el cuello nos despierte, habrá sido demasiado tarde.
Con la aprobación a la reforma del PJ, la secta fascista acaba de dar un paso hacia la nueva dictadura castrochavista.
Huroneo
El engañabobos siendo presidente electo, cometió el error de cancelar el NAIM. Estupidez que le va a costar saldar a una generación de mexicanos.
Encarrerado en la ruta demagógica, no se quiere ir (por lo menos en el membrete) sin vengarse de los ministros de la SCJN, destruyendo y colonizando el PJ.
Con el aval de las mayorías destruyó lo que recibió en 2018. Independientes ya solo nos quedan pocos medios de comunicación y las redes sociales.
Callar disidentes es lo que sigue en este nuevo régimen dictatorial mexicano castrochavista.