SIMULACIÓN Y REALIDAD / DESDE CABINA

04/06/2025
Simulación y realidad / #DesdeCabina

Es de no creerse el grado de irrealidad y desvergüenza que caracteriza la vida pública del país.
Resulta que hoy en día hemos regresado al viejo lenguaje político que representó una de las épocas más oscuras en las que la mentira era la verdad y la simulación se nos presentaba a los ciudadanos como lo verdaderamente real.
Hoy, hay quienes se atreven a declarar que «democracia» es que unos cuantos decidan lo que hay que hacer y, peor aún, que «instruyan» a las mayorías a quienes sí deben elegir y a quienes no por ser «contrarios» al régimen en turno.
A ese nivel hemos llegado. Los valores a los que aspiraba la sociedad hoy se presentan como lo que hay que desechar y en su lugar adoptar lo que hace varias décadas se rechazaba por ser antidemocrático y autocrático.

Se disfraza de «participación exitosa» aquello que se impone y se rechaza cualquier intento por plantear otra forma para la toma de decisiones; se utilizan definiciones amorfas y sin significado real para designar a la sociedad y se le niega dar su opinión bajo el argumento de que los «que saben» son los líderes sociales que encabezan el movimiento.
Lo que vimos los mexicanos en el reciente proceso electoral para la elección de 881 cargos del Poder Judicial es una muestra de que una reforma sin consenso social genera desconfianza y solo contribuye al debilitamiento del Estado de Derecho.
La escasa participación de votantes confirma que este modelo electoral no responde al interés ciudadano.
Y lo peor, esto no puede sentar precedentes para justificar recortes presupuestales y reducir el número de casillas que solo debilitan la logística electoral, porque atenta no solo contra la independencia de los órganos electorales sino contra la genuina democracia, lo que significa ir en contra de un «gobierno del pueblo».
Resulta una incoherencia decir que la elección correspondió a una demanda ciudadana y observar, en la realidad, una escasísima participación que responde a un desinterés generalizado.

Ante tal panorama diversas organizaciones sociales ya trabajan en una propuesta de contrarreforma judicial que se construya con base en criterios técnicos y de participación, no de unos cuantos, sino de expertos, organizaciones sociales y actores del sector productivo.
El reto es impulsar un sistema que realmente garantice certeza jurídica, profesionalismo y acceso efectivo de toda la sociedad a la justicia. De no hacerlo, las consecuencias las lamentaremos todos, pero principalmente aquellos sectores más olvidados y con mayores rezagos.
Pedirán anulación…

En su conferencia de prensa del lunes pasado, acompañado de sus coordinadores parlamentarios en el Congreso, Alejandro «Alito»Moreno, líder nacional del PRI, dio a conocer que su partido reúne toda la documentación necesaria para solicitar a las autoridades electorales la anulación de los comicios judiciales por presuntas violaciones a los principios constitucionales, a las escasa participación ciudadana (12-13 por ciento del padrón) y al alto abstencionismo que se registró el domingo primero de junio.
«Estamos preparando una denuncia robusta», declaró el líder opositor al anunciar que la demanda se presentará ante los organismos jurisdiccionales al no cumplirse los «principios democráticos de certeza sobre lo que se va a votar y por quienes se va a votar».
Moreno Cárdenas advirtió que tal como se llevó a cabo la elección se pone en riesgo el tratado comercial con Estados Unidos y Canadá «y eso va a alimentar aún más el tema arancelario y el tema económico con los Estados Unidos».
Asimismo, agregó que también habrá demandas ante organismos internacionales. Finalmente, hizo hincapié en que no se pueden gastar más de 7 mil millones de pesos en una farsa electoral cuando diversos sectores públicos permanecen «desmantelados» en perjuicio de millones de mexicanos.