CON EL AGUA HASTA EL CUELLO / LUMINISCENCIA
13/11/2024
Con el agua hasta el cuello / #Luminiscencia
El país atraviesa una situación crítica en diferentes frentes. El gobierno de Claudia Sheinbaum no lleva ni tres meses y la violencia, la amenaza de aranceles y deportaciones por parte de Trump, los efectos jurídicos y financieros de la reforma al Poder Judicial, así como las divisiones internas en Morena; tienen con el agua hasta el cuello a esta administración.
Apenas el pasado fin de semana, en Querétaro se registró el ataque de un grupo armado que costó la vida a diez personas. Pero los hechos de violencia son reiterados. En un estudio reciente, el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM concluyó que en México se viven varias guerras.
Y es que las disputas entre grupos criminales: en Sinaloa, Guanajuato, Guerrero, Chiapas y otras entidades, así lo demuestran. El Estado Mexicano, dice el estudio, está prácticamente rebasado en muchas regiones.
En medio de este escenario, caravanas de migrantes procedentes de centro y Sudamérica, atraviesan el país con la intención de llegar a Estados Unidos. Saben que Trump llegó a la Casa Blanca y temen lo peor.
Y aunque en el sexenio anterior México acogió muchos migrantes, de manera irregular y rechazando incluso el esquema de tercer país seguro; el nuevo gobierno no se ha pronunciado al respecto.
No hay claridad, ni sobre la frontera compartida, ni sobre la posibilidad de dar asilo a esas caravanas.
Por el contrario, el Presidente Donald Trump ha sido reiterativo en su mensaje de deportar a miles de migrantes, incluidos los connacionales.
De hecho, hace unos días nombró a su zar de la frontera, Tom Homan, un tipo duro que no tiene empacho en manifestar públicamente sus posturas racistas y su afán de criminalizar a todo aquel que no cuente con documentos oficiales para vivir en la Unión Americana.
El Gobierno mexicano, a través del Secretario Marcelo Ebrard, ha dicho que responderá también con aranceles las amenazas del republicano. ¿De verdad aguanta la economía nacional una confrontación de esta naturaleza?
En el fondo, el neoyorkino podrá ser todo, pero en algo tiene razón: México ha sido omiso en el control de sus fronteras y debe hacerse cargo de éstas.
Con problemas de tal envergadura en la política Interior y exterior, el gobierno de Claudia Sheinbaum continúa enfrentando los costos de la reforma al Poder Judicial, una reforma que lejos de buscar la democratización de jueces, pretende el control de esa instancia.
Los inversionistas, nacionales y extranjeros, lo saben. Por ello la zozobra sigue rondando el terreno económico.
Y ahora también, con lo visto en el Senado mexicano tras la ratificación de Rosario Piedra al frente de la CNDH, contrario a la voluntad de la Presidenta; se abre un espacio para la especulación: ¿quién manda verdaderamente entre las huestes de Morena?, ¿qué efectos tendrá en materia de gobernabilidad, que unos sigan respondiendo a los intereses del líder histórico, López Obrador?
La administración de Sheinbaum, repito, tiene el agua hasta el cuello y no se ve por donde encuentre, por lo pronto, una bocanada de oxígeno.